martes, 27 de diciembre de 2011

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peces de ciudad*
  Desafiando el oleaje sin timón ni timonel por mis sueños va ligero de equipaje sobre un cascarón de nuez. 

Mi corazón de viaje, luciendo los tatuajes de un pasado bucanero de un velero al abordaje, de un no te quiero querer.

Y cómo huir cuando no quedan islar para naufragar al país donde los sabios se retiran del agravio de buscar labios que sacan de quicio.


Mentiras que ganan juicios tan sumarios que envilecen el cristal de los acuarios de los peces de ciudad, que perdieron las agallas en un banco de morralla en una playa sin mar.


A veces llega la hora sin darnos tiempo.


este año, no te has portado bien PN*

Sin pensarlo, sin asimilarlo. No queremos imaginar nada, preferimos no saber. Llega sin que lo sepamos. Parece estar lejos, pero al final, está demasiado cerca. Me da frío el pensarlo. El creer que a ti, te ha llegado, me repugna. (¿Por qué la vida es injusta?) Cuando nos enteramos, el esófago se me hizo un lío. Como un nudo de zapato, pero sin lazada. Quise llorar; me mantuve en mi línea. Pero hoy, ya no pude. Hoy ya no nos has visto. Aún así, si pudieras, no te habría gustado. El poco recuerdo de ti, ha sido suficiente para empañar mis ojos.

Que allá donde estés, espero que empieces mejor de lo que acabaste, y que te extrañaremos, sí, eso, ni lo dudes.  

- Que el hombre NO ríe ante la muerte..

sábado, 24 de diciembre de 2011

Tú acuérdate de respirar,
























eso sí que no se te puede olvidar. En realidad, morir nunca sirvió; morir de amor, claro.. Porque siempre acaba llegando otro morir, que te pone en manos de un segundo morir, que le cede el paso a un tercer morir...
Pero bueno, todo pasa aunque pese... Y si pesa y no pasa? Tú acuérdate de respirar.






lunes, 19 de diciembre de 2011

p of paradise



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Tú acuérdate de respirar..

eso sí que no se te puede olvidar...

En realidad, morir nunca sirvió... Morir de amor, claro.. Porque siempre acaba llegando otro morir, que te pone en manos de un segundo morir, que le cede el paso a un tercer morir... 

Pero bueno, todo pasa aunque pese... Y si pesa y no pasa? Tú acuérdate de respirar.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Doy gracias

a aquella fuerza del más allá, que hizo que hoy te hiciese recapacitar. Posiblemente, mi carta a Papá Noel, ha llegado antes de tiempo, y tras mis súplicas, te ha hecho pensar. A Baltasar se lo iba a comentar, pero veo que el gordito con barba blanca, se ha adelantado.
¿Sabes? Por un momento, creí que todo esto tendría un final, pero veo que aquellas palabras del pasado, que hiciste prometer, han resucitado en este futuro presente; que la amistad iba a estar por encima de cualquier mal, y ahora puedo decir, que eso es verdad.
Me ha gustado oír, que me echabas de menos, que tenías ganas de verme. Pensé en hacerme la dura, y hacerte entender, que el único arrastrado aquí, serías tú; pero sería mentira. No te puedo negar que has sido algo grande para mí, muy grande pequeño, desde tus doce añitos hasta tus dieciséis actuales; ni tampoco te diré, que nunca me has importado, que nunca me ha gustado darte abrazos, y menos ver tu peli favorita de un caballo llamado “Spirit” contigo. Que sí, que lo admito, que te echaba en falta, y más de lo que crees, y que espero que esta vez, todo sea de verdad.